La Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT) dictó una nueva medida que modifica el proceso de incorporación de personal: ya no es obligatorio obtener el visado del examen preocupacional antes del inicio de tareas.
La resolución 53/2025 —publicada el 5 de diciembre de 2025— forma parte del proceso de simplificación administrativa impulsado en materia laboral.
Aun así, es fundamental aclarar que el examen preocupacional continúa siendo plenamente obligatorio conforme a la Ley 24.557, sus decretos reglamentarios y la normativa general de higiene y seguridad.
1. Qué cambió: el visado deja de ser obligatorio, pero sigue existiendo como opción
Hasta ahora, el procedimiento exigía dos pasos:
- Realizar el examen preocupacional
- Presentarlo para su visado ante la ART o la SRT para validarlo administrativamente.
Con la nueva medida, el visado deja de ser un trámite obligatorio, pero no desaparece: pasa a ser optativo.
Esto significa que las empresas pueden decidir:
No gestionar el visado, lo que simplifica la incorporación de personal y reduce tiempos.
Solicitarlo de manera voluntaria, cuando consideren que aporta mayor respaldo documental o reduce riesgos legales.
2. Qué no cambió: el examen preocupacional sigue siendo obligatorio
Es clave destacar:
✔ El examen preocupacional debe seguir realizándose antes del inicio de tareas.
✔ Su ausencia mantiene consecuencias legales, civiles y laborales.
✔ Es la principal herramienta para determinar aptitud física, riesgos preexistentes y compatibilidad con el puesto.
El cambio normativo solo modifica la instancia administrativa del visado, pero no afecta la obligación médica y legal de realizar el examen.
3. Por qué el visado optativo puede ser útil en algunos casos
Si bien ya no es obligatorio, hay escenarios en los que optar voluntariamente por el visado puede ser beneficioso para la empresa. Entre ellos:
Actividades de riesgo o de alta siniestralidad
Construcción, industria pesada, logística, transporte, seguridad privada, entre otras.
En estos casos, es estratégico contar con una validación adicional del examen.
Puestos críticos o de alta responsabilidad
Choferes profesionales, operadores de maquinaria, posiciones de mando, etc.
El visado ayuda a reforzar que la empresa actuó con la mayor diligencia posible.
Antecedentes dudosos o documentación médica previa difícil de interpretar
Cuando existen patologías preexistentes, accidentes anteriores o tratamientos en curso, un visado puede fortalecer la posición de la empresa ante un eventual reclamo.
Para dotar de mayor fuerza probatoria al preocupacional
En litigios o determinaciones de incapacidad, un examen con visado puede ser valorado como un elemento de mayor objetividad e imparcialidad.
Para empresas con políticas de compliance y protocolos internacionales
Algunas corporaciones requieren procesos reforzados de due diligence médica.
4. Qué deben hacer ahora las empresas
Con este nuevo escenario, recomendamos:
A. Mantener el examen preocupacional como paso obligatorio y previo al alta del trabajador.
B. Determinar internamente en qué casos optar por el visado voluntario.
Puede incorporarse como parte del protocolo interno según el tipo de puesto o actividad.
C. Asegurarse de que el examen sea realizado por un servicio médico laboral habilitado.
D. Conservar adecuadamente los certificados médicos y respetar la Ley 25.326 de protección de datos personales.
E. Actualizar los procesos de Recursos Humanos para eliminar referencias al visado obligatorio y reemplazarlas por una política flexible, basada en criterios de riesgo.
5. Conclusión: menos burocracia, misma obligación y nuevas decisiones estratégicas
La eliminación del visado obligatorio agiliza el proceso de contratación, pero no reduce las responsabilidades de la empresa en materia de salud laboral.
El examen preocupacional sigue siendo un deber legal imprescindible y uno de los pilares para prevenir conflictos médico-laborales futuros.
El nuevo régimen abre, además, la posibilidad de diseñar políticas internas más inteligentes y basadas en riesgo, eligiendo cuándo conviene solicitar el visado para fortalecer la protección legal de la empresa.
